¡Hasta siempre Lucky!

Esta entrada no hubiera querido escribirla munca, pero creo que se la debo a Lucky y a la gente del Mas Gas. Anteayer, sábado 10 de diciembre, Luciano L., de 43 años, conocido por sus amigos como Lucky, fallecía en un accidente de tráfico, cuando circulaba con su veterana BMW K 100. Me enteré por la tarde a través de la página de Facebook del Mas, primero con un crespón negro y después notificando su fallecimiento. Y me quedé de piedra.

Conozco a lo socios del Mas Gas Club desde hace bastantes años, comenzaron siendo un grupo de jóvenes que acudían a concentraciones con sus motos de pequeña cilindrada. Después empezaron a organizar la suya, que llegó a convertirse en una de las mejores del Sur de España, a la que yo acudía como prensa, publicando luego artículos en Diario Córdoba. Siempre han sido ruteros de largas distancias, recorriendo buena parte de Europa, y actualmente uno de ellos dando la vuelta al mundo en moto. Lógicamente, se fueron hacieron mayores, y así conocí a sus parejas, y después a sus hijos. Compraron una pequeña nave en un polígono cordobés y la transformaron en su sede, con un bar motero en la planta baja y habitaciones en la alta para los niños y para acoger a otros moteros. Y desde hace muchos años colaboran con el ayuntamiento en todo tipo de eventos como carreras populares, cortando calles y señalicando los cruces. En estos días estaban preparando el Toy Run, recogida de juguetes para que los Reyes Magos de Mas Gas los llevaran a niños en acogica por Cruz Roja, actividad que realizan desde hace años.

Uno de sus miembros, Fran, inauguró hace poco el Café Bar Motor Soul, y precisamente allí estuve con Lucky, pues su mujer estaba trabajando allí. Lo conocía desde hace tiempo, y aunque no había tenido mucho trato con él, siempre me saludaba, con la sonrisa por delante.

Ayer domingo, a las cinco de la tarde, fue su funeral en el Cementerio de la Fuensanta, en la carretera de Alcolea. Fui con mi hermano, que los conoce mucho más que yo, y nos quedamos impresionados por la cantidad de coches y motos que había en el aparcamiento, de manera que tuvimos que dar la vuelta, salir del recinto y dejar el coche aparcado en un camino cercano..

Volvimos andando, y el entrar en el camposanto, en una calle ancha que lleva hasta la capilla, encontramos muchos moteros venidos de toda Andalucía, de Faro, de Ciudad Real, que estaban con sus chalecos negros con el nombre del club, en silencio. Miembros del club llevaron a hombros el féretro hasta la capilla, todo en un silencio impresionante. Desgraciadamente he ido a muchos funerales, de mis padres, de amigos….pero nunca he estado en uno con tanto silencio (incluido a los que estaban fuera, muchas veces charlando). Así lo destacó uno de los tres sacerdotes presentes, valorando el respeto de los no creyentes que estaban allí. La salida también fue silenciosa y acabó con un largo aplauso para Lucky. Después los distintos grupos de moteros salieron despacio para volver a sus lugares de origen. Nosotros estuvimos un rato en la sede del Mas Gas, acompañando a los compañeros, que estaban cansados y sobre todo muy afectados.

Para acabar, comentar como al parecer fue el accidente. Poco después de las diez de la mañana, Lucky,  se dirigía a la barriada de Santa María de Trassierra para llevar una prenda de abrigo a su hija de seis años, que estaba con los scouts. Pasado el cruce de la gasolinera hay una recta, y después una curva a derechas.  Es una zona de umbrías, y un vehículo que iba en sentido contrario, al tomar la curva a izquierdas, derrapó y quedó atravesado en el carril contrario. La mala suerte hizo que el motero llegara en ese momento, e impactó en la puerta delantera derecha. Como me contaba ayer Juan R. amigo desde hace mucho tiempo, y miembro de Mas Gas que vive muy cerca, en esa zona siempre ha habido umbrías, pero desde que se reasfaltó la carretera, hace unos años, los sustos son frecuentes con las humedades, más que antes con el piso antiguo. Los vecinos lo han denunciado en varias ocasiones.

Y nada más. Descansa en paz Lucky, y cuida a los moteros desde arriba. Y un abrazo fuerte para su familia y para todos los miembros del Mas Gas.